EMBRIONES EN DÍA 3 O DÍA 5… ¿CUÁNDO TRANSFERIR?
Una de las preguntas más frecuentes que nos plantean en la consulta es cuál es el mejor día para realizar la transferencia embrionaria. La discusión está servida, porque como sabéis todavía no tenemos todas las respuestas y nos queda muchísimo por aprender y descubrir. Podemos estudiar lo que sabemos con los datos actuales:
– Sabemos que de forma natural el embrión implanta en el endometrio en estadío de blastocisto, es decir, en el día 5º o 6º tras la fecundación.
– Sabemos que la tasa de implantación de un blastocisto de calidad está en torno al 50% y que los incubadores y medios de cultivo actuales permiten la llegada a blastocisto de hasta el 60% de los ovocitos fecundados. En ocasiones llegan el 90% y en ocasiones no llega ninguno, esto es directamente proporcional a la calidad de los gametos utilizados, influyendo también la tecnología empleada y la metodología de trabajo de los profesionales.
– La capacidad evolutiva del embrión está directamente relacionada con la morfología que presenta en estadios más tempranos. Es decir, normalmente cuándo vemos que el embrión no evoluciona bien desde el principio… porque las divisiones celulares son lentas, porque se ven muchos fragmentos que no deberían estar, porque hace divisiones anormales en momentos no adecuados… no llega a blastocisto. Estos embriones pueden ser evolutivos el día 3 postfecundación… y degenerar el día 4. Si transferimos, no darán lugar a embarazo. Lo que vemos en el incubador… ocurrirá dentro del cuerpo de la mujer.
Entonces, si el blastocisto ya es un embrión muy evolucionado con estructuras diferenciadas, con un alto potencial de embarazo y que está en el momento natural de implantación… elegimos día 5.
Parece que no hay duda pero entonces… ¿por qué a veces se transfiere en el día 3 de evolución embrionaria? Como sabemos que no todos los embriones llegan al estadio de blastocisto en condiciones in vitro (dentro del cuerpo no podemos conocer el dato de cuántos embriones fecundados correctamente llegan a blastocisto, pero asumimos que una cifra similar, pues los humanos no somos muy fértiles) puede ocurrir que no tengamos embriones para transferir en estadío de blastocisto. Esta realidad crea mucha inseguridad al especialista porque lo que queremos todos es llegar a una transferencia embrionaria… pero la clave es que la transferencia tiene que ser exitosa, la meta no es llegar a transferencia, sino llegar al bebé en casa. Dejar los embriones en evolución hasta día 5 se llama cultivo largo, y se hace muy muy largo, porque vamos viendo cómo se van deteniendo y cómo van cayendo las expectativas y las ilusiones. Me parece una fase emocionalmente durísima, más que la espera al resultado del test de embarazo, por eso hay que llegar a ella conociendo las posibilidades y opciones. Antes de iniciar el tratamiento, tu especialista puede orientarte de qué puede ocurrir y qué espera.
Cuándo tienes experiencia en la transferencia de blastocistos y conoces en detalle los resultados de tu laboratorio, no tienes miedo de esperar y conocer realmente qué va a pasar con los embriones en el día 5. Se consiguen más embarazos cuándo transfieres un blastocisto de calidad que cuándo transfieres 2 embriones en día 3 de evolución, y además minimizando el riesgo de gestación gemelar. Si sólo hay un embrión evolutivo en día 3… y es el que va a conseguir embarazo, va a llegar a blastocisto… y a bebé. Todo depende de la confianza que tengas en tu laboratorio, de los incubadores disponibles, de los medios de cultivo que se utilizan y de los resultados que tenga el laboratorio. Es necesario replicar lo que pasa en el interior de la madre (todavía no hubiera implantado en condiciones naturales y se necesitan concentraciones bajas de O2 para mantener su desarrollo) y vigilar en detalle la evolución de cada embrión.
Existen incubadores en la actualidad que imitan las condiciones gaseosas del interior de la madre y que “graban” al embrión y nos permite tenerlos estudiados con cada división, con cada cambio (qué hacen los incubadores time lapse). Esto nos facilita mucho la clasificación de los embriones, se hace con parámetros basados en la morfocinética embrionaria (su forma y evolución en el tiempo). Se intenta predecir cuál es el que puede llegar hasta el final con más posibilidades. Este criterio (el de tenerlos vigilados) no es infalible, y no siempre conseguimos el embarazo con el primer embrión, porque intervienen muchos más factores, como la genética embrionaria o la receptividad endometrial, pero ayuda mucho.
No existen estudios que encuentren evidencia científica irrefutable en elegir el mejor día, hay que estudiar muy bien cada caso, en medicina no hay siempres ni nuncas, CADA CASO ES ÚNICO y hay que valorarlo para seleccionar el mejor embrión y el mejor momento para transferirlo.
Actualmente, sí que se recomienda transferir un solo embrión para evitar los embarazos gemelares que aumentan el riesgo de complicaciones para el embarazo y para los bebés y cómo es así y queremos seleccionar al mejor, preferimos llegar hasta el final para tener todos los datos y poder llegar al bebé en casa cuánto antes. Como siempre… consulta tu caso con tu especialista, confía en él e infórmate antes de empezar de todas las posibilidades para estar preparados. ¡¡Muchas fertilidades!!
Ana Gaitero
"Bebé en casa cuanto antes."
- ANA GAITERO